La asamblea del movimiento 15M en Huesca desea expresar su repulsa hacia la criminalización gubernamental de personas que participan en movilizaciones sociales, como las desarrolladas recientemente en Artieda, Binéfar o Huesca.
El 5 de diciembre de 2012 acudía a declarar en la capital oscense otra persona imputada en una movilización pacífica frente a grandes obras hidráulicas. El 30 de enero de 2013 acude otro compañero. Ya son ocho los jóvenes acusados por ese mismo acto desarrollado el pasado 10 de octubre en la localidad de Artieda, en el Biello Aragón.
El 15M también rechaza la injustificada carga policial sufrida por lxs vecinxs y amigxs
de esa localidad, durante el transcurso de una protesta pacífica (similar a la realizada por sus habitantes, con los mismos criterios, en ocasiones anteriores) con motivo de la desmesurada expropiación que esta sufriendo esa localidad a causa de las obras de recrecimiento del pantano de Yesa.
Política y grandes obras
El recrecimiento de Yesa y el pantano de Biscarrués, al
igual que numerosas obras contempladas en el Pacto del Agua de 1992, suponen a
día de hoy un exponente más del desgobierno que sufrimos por parte de nuestros
supuestos representantes. Se trata de proyectos faraónicos, apoyados en intereses
partidistas, y aderezados de descompensación territorial y el despilfarro económico, que
proyectan destruir patrimonio natural y cultural, y el derecho al
auto sustento de los habitantes del territorio. Son iniciativas que se imponen sin mediar diálogo con los
afectados, condenándo a los habitantes al abandono de sus lugares de origen y de medios de subsistencia que quedarán anegados bajo las aguas del
ostracismo político.
Vivimos en una época de gobiernos deslucidos, de corrupción
política, de clientelismo y prevaricación. Sufrimos las consecuencias de una gestión interesada, que nada tiene que ver con el Interés Público General,
sumida en un amplio desconocimiento hacia el medio rural y el aprovechamiento
agrícola.
(Sobre la naturaleza de los "grandes proyectos", ajenos con mucha frecuencia al interés
general, y necesitados de la complicidad de sectores económicos y
políticos, es interesante la lectura de este artículo de José Manuel
Naredo: http://madrid.tomalaplaza.net/2012/11/29/jose-manuel-naredo-explicacion-de-la-naturaleza-perversa-de-los-megaproyectos/ )
La política hidráulica necesita una revisión. El censo de concesiones de agua con uso agrícola está, actualmente,
totalmente desfasado de la realidad. Ya en 1985 los técnicos de la Confederación
Hidrográfica del Ebro(CHE) advirtieron a las autoridades
pertinentes que los usos reales del agua en Aragón no coincidían en absoluto
con los registros de la
CHE, en cuanto a los titulares del uso y la cantidad de agua
empleada y que se requería su inmediata actualización para poder realizar
cualquier actuación de manera eficaz y coherente. Pero las decisiones sobre algunas grandes obras hidráulicas ya
estaban tomadas, el interés de unos pocos pesa más que el Interés Público
General y para poder ejecutar sus deliberados planes, se ocultó y falseó la realidad
de Aragón.
Ahora, la realidad nos sigue golpeando de lleno en Artieda,
afectada por el recrecimiento, expropiada de manera forzosa para la realización
de esta obra desfasada y lujuriosa. Los derechos del 99% son apaleados para el
beneficio del 1% (en el que, entre otros, se encuentran los propietarios de grandes constructoras). Ciudadanos, amigos, vecinos,... no debemos permitir que se criminalice
a personas represaliadas por defender sus derechos. No podemos consentir que sigan adelante proyectos que son ejecutados con los mismos métodos de nuestro oscuro
pasado, la represión y la criminalización de los afectados.
Protesta ante los juzgados de Huesca. 5-12-12 |
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