En su Aragón no cabemos todxs.
El domingo 21 de abril varixs compañerxs que están haciendo
la huelga de hambre para reivindicar otro modelo político y social que tenga a
las personas como preocupación central, fueron expulsados del acto
institucional del Día de Aragón en Huesca. Su delito: llevar en su ropa un
rótulo que decía “hambre de justicia”.
Habían entrado con invitación oficial, remitida a personas
que no comulgan con el saqueo a que estamos siendo sometidos. Su pretensión era
entregar a la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi ,el
manifiesto de esta huelga de hambre que concluirá el #12M, con las manifestaciones
del 2º aniversario del 15M. Al final una de las compañeras consiguió llegar a
ella y dárselo. Pero en su celebración del Día de Aragón no cabían. En su
Aragón no cabe la discrepancia. En su Aragón no caben los derechos de la
mayoría. La policía les sacó a la fuerza.
En el exterior las pancartas pedían justicia y democracia.
Mientras dentro el acto seguía, lleno de trajes, y de protocolo; y de gente
complaciente con el poder (con ese poder que agrede a la población con
constantes recortes en sus vidas) incluidos dirigentes de otras organizaciones
políticas y hasta “agentes sociales”. Todo muy cordial.
¿Y qué celebran? ¿Por qué siguen acudiendo a ese tipo de actas, y sonríen a las
cámaras? ¿Qué complacencia cabe con un poder que provoca que 7000 familias
pierdan sus viviendas en 5 años en Aragón? O que los pueblos se queden sin
escuelas; que se cierren servicios sanitarios, o que españolxs y extranjexs pierdan
el derecho a ellos. ¿Qué sonrisa cabe compartir con quienes provocan con sus
políticas al servicio de los poderes económicos que niñxs pasen hambre, también
en Huesca; o que en esta ciudad, y en tantas otras, haya gente que tenga que
vivir en un coche, en un porche, o en un cajero; o que lxs jóvenes tengan que emigrar
al ver cerrado el futuro? ¿Qué se puede compartir con quienes propician que se
deterioren las condiciones de vida de la inmensa mayoría de la población (el
99%), que crezca la pobreza, que nuestros mayores tengan que ajustar cada vez
más su ya ajustada vida…? ¿Cómo pueden
tomar un cóctel, un vino o unos canapés (pagados con el dinero de todxs) con
aquellxs que han sembrado en las personas la ansiedad y la incertidumbre ante el futuro, al ver
cómo se destruyen empleos, pequeños negocios, posibilidades de vida; y que, en
lugar de intentar resolverla, se dedican
a quitar esa ansiedad e incertidumbre a los banqueros, a los poderes financieros (también con el dinero de todxs)…?
Solo se puede estar ahí si formas parte de lo mismo. O si has reflexionado poco. Y allí están,
separados de la población -de ese Aragón que dicen celebrar, gestionar, representar,…-
por muros, policías y “derechos de admisión”.
Tienen miedo de “sus representados”. Desde hace ya tiempo. Incluso
se plantean que no se pueda acceder a los plenos de las Cortes. O se trata como
sospechosos a quienes acuden al Ayuntamiento, o rodean con siete vallas el
parlamento para alejar de él al “pueblo soberano”; o toman posesión -como hizo la
alcaldesa de Huesca-, blindados, encerrados, aislados de la gente y rodeados de
la “gente bien” (y tienen la desvergüenza de llamarlo “la fiesta de la
democracia”)… Pero allí siguen, muchxs que incluso se presentan como alternativa,
entre sonrisas y canapés, aplaudiendo sus discursos vacíos que, con la que está cayendo, siguen hablando de "dominios esquiables" y "travesía central".
Hay que romper con esto.
En su Aragón no cabemos todxs. Construyamos uno en que sí se pueda.
(Que dimita el gobierno. Y se vaya toda la gente
complaciente que le acompaña en su destructiva labor.)
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Hasta el 12M, #Hambredejusticia: cada día en Pza navarra, de
18 a 21h
#12M Sí se puede. Movilización
general
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