El jueves 15 de octubre Huesca y Fraga, simultáneamente, a las 18 horas, realizarán actos reivindicativos.
Los porches de Galicia acogerán en la capital provincial un punto informativo para denunciar que los desahucios -pese a las afirmaciones y promesas de los gobernantes- han crecido un 7% en Aragón durante los últimos 6 meses. En esta localidad también se pondrá una mesa para recoger firmas el viernes 16, a las 19 horas, en el mismo lugar.
La otra protesta del jueves 15 tendrá lugar ante la sede de Cai-Ibercaja (Av.Aragón 45) de Fraga, contra los desahucios y las clausulas suelo de las hipotecas –declaradas ilegales y que han beneficiado a los bancos frente a las personas que trataban de adquirir su vivienda. Este acto servirá de apoyo a lxs afectadxs que está reclamando judicialmente en el Bajo Cinca contra estas claúsulas abusivas.
Y el sábado 17, Benasque un grupo de vecinos convoca una concentración, a las 18 horas, contra el posible desahucio de una habitante de la localidad, tutelada por los servicios sociales, que han puesto en venta sus propiedades a bajo precio, según informan compañerxs desde el valle ribagorzano.
Defender el derecho de una vivienda digna para todas y todos es el objetivo de estos actos que pretenden “hacer visible un problema que se está llevando por delante a tantas familias agobiadas por no poder pagar las hipotecas o que no pueden hacer frente a sus alquileres, familias que están viviendo afinadas por no poder conseguir un piso de alquiler social adecuado a sus posibilidades y familias que están pendientes de que se dicte sentencia de desalojo que las eche a la calle sin posibilidad de otras viviendas”, señalan lxs activistas antidesahucios de Huesca.
Los datos publicados esta semana por el Consejo del Poder Judicial muestran que el número de lanzamientos ha crecido, en los últimos seis meses, un 7% en Aragón, con 1005 lanzamientos (desahucios) frente a los 941 del pasado año en el mismo periodo. Solo en Huesca se han producido 199 casos.
Ante ello se denuncia la responsabilidad de los bancos que, además, “tienen los pisos que han obtenido de las subastas por impagos, sin registrarlos o pasándolos a inmobiliarias que no hay quien las controle, vendiéndolos a fondos buitre o simplemente acumulándolos en sus arcas sin ningún tipo de control”.
Ente otras medidas se exige la urgente creación de una bolsa de vivienda, tanto del ayuntamiento como de la DGA, regulada por servicios sociales que garantice el acceso a una vivienda social administrada desde lo público. Para ello se pide también que haya un conocimiento real de los pisos cerrados que hay, y un listado de los edificios infrautilizados de la ciudad y que se tomen medidas para facilitar que se incorporen a la bolsa de alquiler. La puesta en marcha de una oficina real de mediación hipotecaria, es otra de las reivindicaciones, “ya que la actual es inexistente e improductiva, es otro coladero más de dinero público que no ha servido para nada”. En Huesca todavía se está a la espera de la puesta en marcha de una bolsa Municipal de Alquiler Social, cuyo arranque se exige que se acelere.
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